quarta-feira, agosto 20, 2008

¡¡¡Oro para México!!!

La sensación para Guillermo debió ser indescriptible: nuestra bandera (la más bonita del mundo) alzándose ante sus ojos y el vaivén sublime de los acordes del himno nacional... ¡Cómo no llorar!

¡Felicidades, Memo!



Nenhum comentário: